sábado, 25 de junio de 2011

La respuesta de en que momento la belleza de algo tan bonito se perdió no lo se, actúo como si todo siguiese igual, te hablo pero ya no me dices con el corazón que me amas aunque en palabras casi forzosas lo haces, como quien no quiere perder sus recuerdos pero ya son borrosos y confusos, duele pensar que el único ser al que realmente se ha amado ya no es el que compartía la alegría del dolor, un hola, una llamada corta casi diciendo un adiós como saludo, la falta de palabras, las cuales un día hubiese podido escribir un libro exageradamente largo porque sobraba que decir, ahora el silencio es el mejor amigo entre nosotros, la distancia una forzosa perdida de memoria y el desamor la forma de decir todo termino, y yo seguiré aquí viviendo entre cada momento que pase a tu lado, como si pudiese tocarte, realmente estoy allí , tan real como lo fue en ese entonces, ¿cómo pensaras tu de mi ahora? al menos ¿me recordaras de vez en cuando?
Esta es solo una pequeña carta de las muchas que te he escrito, será una de las tantas que jamás veras y que al igual que el resto pasara toda su vida en una pequeña caja esperando una falsa ilusión de que un día puedas ver lo que siento y pienso de todo lo que un día fuimos y que ya no seremos  nunca mas . . .